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El Instituto de la Cultura publica un libro sobre la fiesta de El Diablillo de Sepúlveda

Quedan dos días para que los diablillos vuelvan a recorrer entre antorchas, y escoba en mano, las calles de Sepúlveda, y pocas cosas quedan por ultimar en la villa. No obstante, el Palacio Provincial acogía esta mañana uno de los últimos actos previos a la celebración: la presentación de 'Fiesta de El Diablillo en Sepúlveda', un libro publicado por la Diputación con motivo de la declaración de la celebración como Manifestación Tradicional de Interés Cultural Provincial.

El reconocimiento, concedido por la institución provincial en 2018 y vinculado al artículo 2 de la convención de la UNESCO para la salvaguardia del Patrimonio cultural e inmaterial, implicaba también el compromiso del Instituto de la Cultura Tradicional Manuel González Herrero de editar esta publicación, que, según han explicado esta mañana el presidente de la Diputación, Miguel Ángel de Vicente, el alcalde del municipio, Ramón López y el diputado de Cultura, Juventud y Deportes, José María Bravo, será puesta a la venta en la oficina de Turismo de la localidad por un precio significativo de dos euros. Así, el dinero recaudado de la venta de estos libros será destinado a las distintas necesidades de la celebración de la fiesta.

 

Entre las personas que mejor conocen esta festividad se encuentran José Manuel Cristóbal, miembro de la Asociación de Amigos del Diablillo, y Margarita de Frutos, responsable de llevar a cabo el estudio de esta emblemática tradición y plasmarla sobre el papel. Ambos comparecían también en la rueda de prensa de hoy y explicaban cómo es el ritual y qué importancia tiene para la villa.

 

De Frutos, muy vinculada a la cultura y al turismo de la localidad, puesto que es técnico en el Ayuntamiento de ambos sectores, destacaba la relevancia que han tenido en la publicación "los testimonios de los sepulvedanos y sepulvedanas, después de muchos meses de trabajo sin demasiado éxito, tratando de encontrar documentos que permitieran narrar el pasado y señalar la fecha de inicio de esta celebración". "Son ellos quienes han permitido dar forma a una fiesta cuyo origen se pierde en el tiempo, pero que gracias al trabajo del ayer y del presente, sigue más viva que nunca", matizaba la encargada de escribir 'Fiesta de El Diablillo en Sepúlveda'.

 

Y es que, cada 23 de agosto a las diez de la noche, la plaza de España de Sepúlveda apaga sus luces para ver salir de los alrededores de la iglesia de San Bartolomé a los protagonistas del rito; seis diablillos que, entre el fuego de la hoguera, van apareciendo por la calle que lleva el nombre del santo para corretear por la villa dando escobazos a aquellos que salen a su encuentro. Tal y como han recordado los presentes, la creencia popular asegura que, en esta noche de agosto, el apóstol libera al diablo de las cadenas que lo atan, hasta que aproximadamente media hora después lo reclama de nuevo para volver a atraparlo. Entonces, los seis diablillos llevan a cabo una última carrera juntos y regresan a la iglesia para poner fin al ritual.

 

La publicación, que recoge la evolución histórica y los datos principales de lo que ha sido y es la fiesta de El Diablillo, pretende dejar constancia e impedir que los recuerdos que aún viven en la memoria de los sepulvedanos se pierdan, así como poner en valor de manera escrita una tradición que para los vecinos de la villa es única en el mundo. "Espero que a través de este libro la gente pueda viajar en el tiempo y llegar hasta la actualidad", afirmaba Margarita de Frutos, destacando una vez más su compromiso de hacerla perdurar, "encendiendo cada año su hoguera y su emoción" y reiterando su agradecimiento a cada una de las personas que cada año hacen posible esta fiesta, así como a aquellas que le han permitido "descubrir a través de sus ojos la esencia de El Diablillo".

 

En la noche del próximo viernes, la luz de la hoguera de San Bartolomé volverá a iluminar la villa y las travesuras de los diablillos volverán a llenar de carreras y risas la noche sepulvedana.